MOMENTOS DE EMOCIÓN
En 64 años de una pequeña fábrica, como la nuestra, ocurren muchos momentos donde la emoción se impone sobre la simple transacción comercial. Es ahí donde nos enamoramos de nuestro producto, el que es capaz de traspasar ideologías, barreras sociales y culturales y también fronteras. Hasta el momento no hemos conocido a nadie que permanezca indiferente cuando conoce el proceso, cuando ve nacer una baldosa decorada o incluso cuando al maestro se le rompe su creación en mil pedazos al desmoldar. Cada momento es mágico y nos gusta mucho vivirlo y gozarlo.
Queremos compartir con ustedes algunas pequeñas historias de 64 años de vida como empresa.